viernes, 15 de agosto de 2014

Ritmo.

No soy tan feo ni tan malo así que sólo me queda ser el bueno. La verdad es que mi perro se parece a mí, entre un tipo como yo y una mujer, siempre la elige a ella y siempre le regalan una caricia al muy cabrón. Hoy le he gritado a mi dinosaurio ¿estás roto o qué? De todas formas siempre he preferido ser el último boy scout que un día de furia. Da igual, terapia a la americana. Casi me hacen claudicar pero no soy un ratón ni nadie me va a convertir en rata. Mi profesión es otra, ya sabéis, montado en Rocinante y con un perro como escudero. ¿Qué puedo decir? Las palabras pueden ser preciosas pero ¿cuántos de vosotros os partiríais la cara con molinos? Chaval, estás flipado. Ya he dicho que prefiero el término, caballero.
¿Queréis un poco de vacile? Esperad que me pongo a escuchar rap... mucho mejor, vamos a empezar. Últimamente me sentía como Benjamin Button pero la verdad es que siempre he preferido la frase final del club de la lucha y la canción de después con Marla del brazo. A mi alegato me remito aunque lo regalara. Si alguien tiene dudas, que se lo pida prestado y aprenda. No soy del tipo que suelta reprimendas pero tengo que decir que si eres tan tonto como para volver a fumar porque a una mujer le gustan los fumadores, y sobre todo si ella no fuma, recuerda que cuando cortéis sólo te dejará un cáncer y ella no tendrá otro igual... Ya me callo.
¿Alguien quiere bailar? ¿No? Pues ya bailo yo en calzoncillos por el salón como en Risky Business. Venga ese cuello para arriba. Me debes una peli y una cita en tu agenda pero yo no pido . Just saying... Ya me callo.
De hecho, no, porque para un placer que nos podemos dar los caballeros, lo pienso disfrutar. A lo Tony Montana, sólo con mis huevos y mi palabra. Orson, no me mires mal, que me refiero a otra cosa. A lo que iba, estas dos cosas no suelo romperlas, la primera por el dolor físico y la segunda por el mental. A veces me voy por las ramas pero el caso es que si no sabes silbar siempre puedes hacer chas. Tranquila, NO HOPE. I KNOW. Esto hubiera quedado mejor si alguien me hubiera hecho los coros. Lo que me pasa es que hace días que no escribo una canción y últimamente mis dedos se mueven demasiado deprisa para no tener ningún himen que acariciar. Es una cuestión de ritmo y sobre eso también podría vacilar... Ya me callo.

¿No te ibas a callar? Hay tantas cosas que debería hacer y no me da la gana. Supongo que aún no he soltado la frase perfecta y mis dedos no se quieren callar. Yo no soy culpable de nada, sólo me dedico a hacer flexiones con mi mente y pene. El ritmo suele ser rock o rap y aunque varíen los planes, ya sabéis como va. Echarle huevos sigue siendo una cuestión de echarle huevos y autocitando un consejo que hace poco di: haz lo que quieras porque al final, por muy bien acompañado que duermas, eres tú el que tiene que cerrar los ojos. Me descubro moviendo el cuello y mi perro lo mueve igual, no sé si asiente o también sigue el ritmo del rap. Paz.

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